Racing y River dejaron todo a mano en el partido de ida de Copa Libertadores en el Cilindro de Avellaneda. Empataron 0 a 0 y dejaron la serie abierta para definir en El Monumental. El partido se dio como se esperaba cuando se encuentran dos equipos del mismo país.
Ambos se midieron y jugaron sin arriesgar por demás. De cualquier manera por momentos le dieron dinamísmo con un ida y vuelta hacia los arcos. Emociones muy pocas, tuvieron apenas una jugada clara cada uno. Pinola pudo haber firmado la “ley del ex” con un remate en el punto penal pero su remate se fue al lado del palo.
La Academia tuvo su chance mediante un contraataque que finalizó Bou, pero su remate se estampó en las manos de Armani.
Antes de irse al descanso, el equipo de Gallardo sufrió la expulsión de Leonardo Ponzio. El Millonario se quedó con un jugador menos para todo el complemento y pierde al capitán para la vuelta a fines de agosto. Los de Coudet con un jugador más en el campo no cumplieron las expectativas.
El local no logró asediar al rival. La incorporación Fernández tuvo una posibilidad con un remate desde afuera; solo eso generó Racing, después algunas insinuaciones. La jugada más clara llegó en el final: Cristaldo cabeceó en soledad para poner lo que era el 1-0 pero Armani lo evitó con una sobria atajada.
El arquero de River le volvió a impedir una sonrisa a Coudet y a Racing, que ahora deberá definir en Nuñez el pase a cuartos de final el miércoles 29 de agosto.
