La ceremonia de la final del Mundial estaba llegando a su fin con muchos artistas de renombre. Pero todo el estadio se vino abajo cuando apareció Ronaldinho, que entró tocando un instrumento y la rompió.
El mundo entero se rindió a los pies del ex Barcelona, que salió a escena con su sonrisa característica. Hecho que hizo, en ese instante, que las redes sociales exploten y se llene de mensajes Twitter hablando sobre él.