Lionel Messi se enfrentará a uno de los desafíos más grandes, no sólo de su carrera, sino de su vida. El Mundial de Rusia es su gran oportunidad para coronarse campeón. El rosarino lo sabe y es su obsesión. Por ello es que se entrena para estar físicamente apto y dar lo mejor.
El capitán del combinado nacional sabe que “es ahora o nunca”, ya que considera que será muy difícil mantener el nivel que actualmente posee en Qatar 2022. El rosarino diseñó un plan que llevó adelante a rajatabla para llegar en óptimas condiciones e intentar comandar a sus compañeros a la gloria, tras quedar en la puerta en Brasil 2014 (perdió en el suplementario la final ante Alemania).
La rutina del “10” incluye cuidados físicos, una estricta dieta y la práctica del kick boxing. Pero más allá de esto, Messi no quiere ningún tipo de privilegio. De hecho, rechazó una propuesta de Jorge Sampaoli, quien quería que el ’10’ llegue a la cita mundialista descansado y con la cabeza tranquila, por lo que le propuso tener una licencia especial: tomarse unas mini vacaciones y sumarse a las prácticas con al Selección directamente en Barcelona. El capitán le dijo terminantemente que no.
