La relación entre la Asociación del Fútbol Argentino y River no es buena. Esto es desde las últimas elecciones. es Rodolfo D’Onofrio nunca estuvo de acuerdo con el armado político de Viamonte 1366. Además, la estrecha relación de Claudio Tapia, presidente de Barracas Central pero hincha de Boca y Daniel Angelici, le generan desconfianza al titular riverplatense.
El desplante de Tapia en la final de la Copa Argentina agitó la interna. El titular de la AFA no participó de la entrega del trofeo que River le ganó a Atletico Tucumán, en Mendoza. Las aguas parecieron calmarse en la Supercopa Argentina. Al pie de la Cordillera, el hombre fuerte de AFA participó de la premiación. Sin embargo, los jugadores “millonarios” volvieron a echar leña al fuego al insultar al presidente de la AFA luego de salir campeones. A Tapia no le gustó nada, y lo dijo públicamente.
Las sospechas por los arbitrajes también generaron conflictos. Marcelo Gallardo se mostró desconfiado y generó nuevamente choques entre AFA y River.
El martes llegó un nuevo capítulo. Desde la AFA se comunicaron con River para pedirle prestada la cancha para un entrenamiento de la Selección abierto al público. D’Onofrio se negó explicando que el campo del Monumental sería resembrado a partir del 26 de mayo, un día antes del evento que Tapia pretendía organizar en Udaondo y Figueroa Alcorta. Desde AFA lo vieron como una devolución de “gentilezas”.
Finalmente, el entrenamiento -que será a puertas abiertas- se realizará el próximo domingo 27 de mayo en el estadio José Amalfitani, de Vélez. El mismo contará con la presencia de alumnos de escuelas de la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
Dos días después, el martes 29, la Selección se medirá frente a Haití en cancha de Vélez. Será la despedida de Argentina de los hinchas antes de viajar rumbo a Europa para encarar el Mundial de Rusia.
