Luciana Salazar reapareció este sábado en la pantalla de Telefe cuando se unió a la mesa de Andy Kusnetzoff, y en las redes los usuarios no dejaron pasar el brutal cambio de look de la mediática.
Para muchos televidentes del programa de Kusnetzoff que se volcaron a las redes y hasta se tomaron el tiempo de crear memes al respecto, la mediática luce “más artificial que nunca”.
#PodemosHablar la cara de Luciana Salazar evolucionó más que el fútbol belga pic.twitter.com/Pnc0ZrCxgp
— гель спирт (@AlcoholengelI) 15 de julio de 2018
En la semana en que las críticas a Wanda por su cuerpo normal y natural estallaron, Andy da el ejemplo de la mujer real invitando a Sol Pérez y Luciana Salazar. Bien, eh! #PodemosHablar pic.twitter.com/nhDP5UJwrh
— SiLღ (@SiL_Micky) 15 de julio de 2018
#PodemosHablar
De , Momo a la Salazar , hay 2 operaciones más…de Luli pic.twitter.com/TV9Mc5qBev— ☆Vane☆ (@LaTurkita_Ok) 15 de julio de 2018
Auspicia a Luli Salazar en #PodemosHablar: plásticos Mascardi. pic.twitter.com/1LLq699egw
— Sol Timerpunk 🥂 (@DoniaTroll) 15 de julio de 2018
Auspicia a Luli Salazar en #PodemosHablar: plásticos Mascardi. pic.twitter.com/1LLq699egw
— Sol Timerpunk 🥂 (@DoniaTroll) 15 de julio de 2018
#PodemosHablar Luciana Salazar es una muñequita!!… pic.twitter.com/GvjUvzHDel
— tinchi (@tinchooomc) 15 de julio de 2018
Como Luciana Salazar no podía venir, trajeron una muñeca de cera y la manejan con piolines. #PodemosHablar pic.twitter.com/284xcnKQuE
— Martín (@Martin_BS) 15 de julio de 2018
Pero mas tarde, una declaración de la rubia provocó indignación al dar un paso al frente para hablar de su experiencia bajo la consigna “los que cambiaron su cuerpo para sentirse mejor”.
La sobrina de Evangelina Salazar y Palito Ortega aseguró que ella sólo se sometió a distintas cirugías plásticas para cambiar el tamaño de sus senos: “Cuando me las hice por primera vez yo tenía muchas lolas y había hecho una publicidad en el exterior, tenía la plata, el dólar estaba a 4 y dije ‘bueno’, no sé por qué se me ocurrió…”, comenzó diciendo la platinada.
Y siguió: “Había quedado (con) una barbaridad y mi mamá se me puso a llorar. Las llevé un tiempo y después me fui sacando… a mí me gusta cuidarme mucho, pero no con las comidas, hago ejercicio aunque no soy obsesiva, hace ya una semana que no voy, y me gusta ponerme muchas cremas”.