Rocío Gancedo, ex participante de Gran Hermano 2011 y mediática, tomó la decisión más trágica. Se tiró del balcón de su departamento del quinto piso de la calle Arévalo y Báez, en el barrio porteño de Las Cañitas. Sufría depresión y se había internado en marzo en una clínica psiquiátrica por voluntad propia durante 20 días.
Rocío, de 29 años, vivía sola y hace apenas unos meses, en agosto, se había mostrado alegre en las redes sociales después de un corte de pelo radical y decía que se sentía “libre y feliz”. En ese entonces, hablaba de una “nueva etapa”, tras meses agitados por su internación.
Después de salir de la casa de Gran Hermano, Rocío se volcó a los medios y atravesó diversas etapas con respecto a la exposición: primero la disfrutó. Hizo temporadas de teatro durante el verano, se la vinculó con distintos futbolistas y hasta llegó a posar desnuda en la revista Playboy. En 2014 probó otro rumbo e incursionó en la política de la mano del Frente Renovador.
Su depresión se agudizó tras la muerte de su padre en 2016.