El fin de semana fue la fiesta de casamiento de Eddie Fitte y su novia Carolina. Rodeados de amigos, la bella pareja festejó su amor.
Todo transcurría con normalidad hasta que en un momento de la fiesta sucedió algo impensado, mientras celebraban con los amigos de la pareja, en un momento lo empezaron a “revolear” para arriba, como se suele hacer en los casamientos, y en una bajada, no lo atajaron y se dio la cabeza contra el piso.
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Eddie se puso de pie y al segundo se desmayó, lo sacaron del salón y durante veinte minutos estuvo suspendido el casamiento, según consigna el sitio Tv Bajo Cero.
La ceremonia se reanudó cuando entró la hermana de Eddie y empezó a hablar con el micrófono y dijo “el casamiento no se suspende” y ella cantaba con humor: “Eddie no se murió, Eddie no se murió, Eddie sigue viviendo en el pueblo la puta madre que los parió”.
La boda siguió sin el novio y finalmente Eddie volvió a la fiesta a los cuarenta minutos del accidente. El domingo tuvo que ir a la guardia para controlarse y apelando al sentido del humor que lo caracteriza subió una historia a su Instagram.
Una anécdota increíble, que seguramente Eddie y Carolina, recordarán con mucha gracia en un tiempo sobre el día más importante de sus vidas.
