Florencia Peña fue mamá por tercera vez hace 20 días y está enamoradísima de su nuevo príncipe, Felipe. Es una maternidad diferente para la actriz, por su edad, ya que acaba de cumplir 43, y porque es el primer bebé junto a su novio, el abogado salteño Ramiro Ponce de León.
En diálogo radial con La Once Diez, Flor habló de sus días como “nueva” mamá y confesó que le pasa lo mismo que a todas. Está que explota de felicidad y agregó: “El pequeño no duerme bien por la noche -lo que es perfectamente normal- y la actriz es “un ente”.
“Me agarró más grande y tuve una regresión a cuestiones que ya había dejado atrás. Fui mamá a los 28 años de Toto, a los 34 y a los 43. Es muy distinto porque ya pasé por dos chicos que están grandes y ya pasé por varias etapas y estoy en un momento de mi vida muy distinto. No dormir no es como antes. Yo tuve a Toto y estaba haciendo Disputas, podía ir sin dormir sin grabar. Ahora soy un ente, no estoy pudiendo hacer nada porque me duermo parada. Cuando te agarra grande tiene su lado B”, reveló.
Luego contó que sus otros hijos, Toto y Juan, la ayudan con el bebé y están a full en sus rol de hermanos. Ellos serán los encargados de poner límites, porque los papás ahora son más abuelos, bromeó, en referencia a los permisos. “Ya me tomó el tiempo (Felipe), esto es como un abuelazgo. Yo estoy para malcriarlo. Ramiro es muy relajado como yo. Estamos haciendo todo lo que no hay que hacer, lo metemos en la cama, está todo el tiempo a upa, está todo el tiempo atendido por nosotros”, admitió.
Con respecto al trabajo, Florencia dijo que no tiene apuros para volver al medio, porque Felipe insume hoy toda su energía. “Estamos muertos de amor, no me importa más nada. Ya me va a volver las ganas de laburar y eso. (En los otros embarazos) estaba en etapa de construcción con respecto al laburo. Ahora yo ya sé quién soy. Estar en el candelero no me importa, me gusta laburar porque además vivo de eso pero me tomo todo con más calma”, cerró.
