United Airlines sobrevendió un vuelo y luego fracasó en el intento de conseguir pasajeros voluntarios que abandonaran el avión. Por eso, decidieron escogerlos al azar.
Tres aceptaron sin problemas pero este último, un médico que necesitaba llegar a su casa por trabajo, se negó a bajar de la aeronave.
Finalmente, tres policías lo sacaron a la fuerza de su asiento y lo arrastraron por el pasillo ante la mirada del resto de los pasajeros.