Quizás uno de los goles más gritados en la historia del Barcelona. Es que cuando la historia parecía sentenciada, el elenco Culé logró una verdadera hazaña y logró el 6 a 1 que necesitaba para clasificar y eliminar al PSG en el último minuto de juego.
Messi, más argentino que nunca, se mostró eufórico tras el tanto agónico y festejó la epopeya con los hinchas que estaban en la tribuna. En el medio de los gritos y abrazos, el atacante rosarino le sacó la gorra a uno de los aficionados. Y si, era para sacarse el sombrero…
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