“Apareció de la nada”, contó Parker Simpson, todavía conmocionado por la película de terror que vivió el domingo a la tarde en los Cayos de la Florida, Estados Unidos.
Afortunadamente, el hombre ya salió del hospital, pero tiene las secuelas de una importante herida en su pierna izquierda, que está en proceso de cicatrización.
Primero pareció dirigirse a su acompañante, pero luego lo encaró a él. Tras morderle las dos aletas, le calvó los dientes en la pierna.