¿Te diste cuenta? ¡La Maldición de Hill House está llena de guiños a Stanley Kubrick!

¿Te diste cuenta? ¡La Maldición de Hill House está llena de guiños a Stanley Kubrick!
¿Te diste cuenta? ¡La Maldición de Hill House está llena de guiños a Stanley Kubrick!

Por Alberto Ezequiel Fernández – @albezeq

La nueva serie de Netflix la está rompiendo toda, no es ninguna noticia. Todos los portales levantaron críticas, en su mayoría excelentes, pero la vieja casa Hill House todavía tiene un par de secretos bien escondidos.

A Mike Flanagan, el showrunner de la serie, parece que no le alcanzó con producir una de las mejores series de terror EVER. ¡Además tuvo el tupé de plagarla con guiños a Stanley Kubrick!

¿Te fumaste toda la serie en una noche, pero te perdiste estas referencias? ¡En Nexofin te las mostramos!

¡Atención!: a partir de acá hay algunos spoilers, pero no te asustes (já) que no son graves.

1. Los edificios como personajes

Tanto la Maldición de Hill House como El Resplandor tienen a la mansión y al Hotel Overlook como personajes principales. El rol de las edificaciones muestra una evolución a lo largo de los guiones como si fueran parte del reparto: sufren, lastiman, hablan y viven.

2. El Red Room y la Habitación 237

Acá te va a explotar la cabeza.

A propósito del punto anterior, mucho de lo que pasa en Hill House gira en torno a un cuarto misterioso que tiene puntos de contacto clarísimos con la Habitacion 237 del Overlook. Cada vez que sus puertas se abren, empiezan los sucesos sobrenaturales. Y un dato no menor: en las dos ficciones, cada personaje ve la habitación distinta según sus propios ojos.

Este parecido termina siendo mucho más que narrativo y estético: en LMDHH a este lugar se lo llama Red Room (Cuarto Rojo). Escucharon bien, ¿no?: Red Room. ¿A qué les suena? Bueno, a nosotros nos suena a REDRUM la icónica frase escrita por Danny en una puerta del hotel. ¿Será un Easter Egg?

Pero hay más.

3. Plano secuencia por los pasillos

Kubrick en El Resplandor hizo magia con sus planos secuencia que persiguen a Danny andando en su triciclo recorriendo el hotel. En uno de ellos, se topa con las gemelas tenebrosas. Dejemos para otro momento un análisis profundo de esta escena tan simbólica, pero tengámosla en la cabeza.

¿No les parece inevitable compararla con el momento en el que el joven Hugh (Henry Thomas) recorre los pasillos de la mansión? Vean. Al igual que Danny, cuanto más transita los recovecos de la casa, más encuentros extraños va teniendo.

4. Viviendo entre los muertos

Otro recurso que comparten El Resplandor y La Maldición de Hill House es que los personajes vivos conviven e interactúan una y otra vez con los difuntos. En muchos pasajes de ambas obras hay una línea temporal y dimensional que se desdibuja.

Por ejemplo, este es el caso de la escena donde Jack Torrance (Jack Nicholson) está en el salón de baile (Gold Room) y habla con el cantinero imaginario o fantasmal. Pero también es el de Nell (Victoria Pedretti), cuando vuelve a la casa y se topa con un extraño recibimiento familiar y un ficticio reencuentro con su marido que ya estaba caput.

5. ¿Y si prueban con crema anti-age?

Esta es más chica, pero igual de impactante. El fantasma de la mujer que habita Hill House y el que se encuentra Jack Torrance en el Overlook tienen algo en común: envejecen de golpe. ¡A los botes!

6. Luke & Alex

La Maldición de Hill House también comparte algunas joyitas con otras películas de SK. El personaje que en la serie está más cerca de las drogas, Luke (Julian Hilliard/ Oliver Jackson-Cohen), recibe un regalo cuando era chico muy particular: un sombrero bombín al que sus padres bautizan “el sombrero para chicos grandes”.

Casualmente, este sombrerito resulta muy parecido al que usa Alex DeLarge (Malcolm McDowell) en La Naranja Mecánica. Quizás justo Alex sea el personaje más lisérgico y cercano a las drogas de Kubrick.

7. Un viaje al propio encuentro

Por último, la mejor de todas. Una refe casi imperceptible a 2001: Odisea al Espacio. Cuando el personaje de Keir Dullea, Dr. Dave Bowman, emprende un viaje psicodélico en una de las escenas mas recordadas de la película, finalmente termina el paseo en una habitación junto a lo que parece ser él mismo, en un cuarto por demás futurista.

Esta escena conocida como “Star Gate” expone una especie de viaje al propio encuentro del personaje, que se termina encontrando con su propio ser postrado en una cama de viejo, para automáticamente evolucionar en un feto cósmico y épico.

(La película es de 1968, ¡no vengan con que esto es un spoiler, eh!)

Explicamos esto para contar que algo similar pasa con Hugh de adulto (Timotty Hutton) y su hijo Steve (Michiel Huisman) cuando regresan a Hill House después de muchos años: al entrar, ambos sufrirán una transformación que será para siempre. Cada uno se va a reinventar, tal cual sucedió con el Dr. Bowman.

¿No les resulta familiar el efecto que hacen las luces de los autos sobre los personajes? Esta parece ser una marcada decisión de dirección.

8. ¿Lo que se viene?

Para terminar con este review, vamos con un último detalle. Mike Flanagan ya anunció su siguiente proyecto. ¡Y vaya proyecto! Va a adaptar “Doctor Sleep”, un libro de Stephen King que, como no podía ser de otra manera, es una continuación de… cha chan cha chan… ¡El Resplandor!

Vieron que tan errados no estamos, ¿no? Jejeje.

P.D.: Si encuentran más referencias, pueden enviarlas a nuestras cuentas de Twitter @Nexofin y @Albezeq.