Tremendo momento: Susana Giménez descolocó a Pablo Lescano con sus preguntas

Tremendo momento: Susana Giménez descolocó a Pablo Lescano con sus preguntas
Tremendo momento: Susana Giménez descolocó a Pablo Lescano con sus preguntas

Susana Giménez protagonizó el domingo por la noche una fallida entrevista en su programa con su invitado, Pablo Lescano, cerebro, voz y alma de Damas Gratis, una de las bandas de cumbia más escuchadas del país que hará debut en el Lollapalooza el año que viene.

Pero, tal como ocurrió hace un año con el actor brasileño Cauã Reymond, la diva la pasó mal gracias a las fallidas preguntas de la producción del programa.

“¿Tocás música clásica?”, consultó Susana, en medio de la entrevista.

“No… yo sé tocar cumbia nada más”, respondió el líder de Damas Gratis.

-Ay, me dijeron que tocabas Beethoven.

-No, nada que ver. Beethoven era sordo, ¿no? (sentenció con una sutil ironía)

Era sordo, es verdad… Ahora, me pregunto… ¿cómo habrá hecho para componer si era sordo?

-No tengo la menor idea.

-(Risas) Claro, es verdad. ¡Qué divino! Yo tampoco. Pero siempre me pregunto cómo hizo para hacer esas maravillas…

-Yo sé cómo hago para componer yo.

-¿Y cómo hacés? ¿Te encerrás…?

-No, para nada. Tenemos un teclado que está todo el día prendido. Aparte de compartir una película, compartimos música.

-¿Es verdad que fuiste a 14 colegios?

-Nah, es mentira. Fui a uno en la calle Alsina, que le decíamos “el rancho”, e hicieron un edificio. No sé por qué. Si era un terreno del Estado… Me dio mucha pena. Pero pasé por dos o tres colegios porque a medida que iban quedando un par de previas…

Pero después la entrevista tomó un buen rumbo y Susana dejó de lado el papel que le ofreció su producción y se interiorizó en el pasado del músico, que reveló: “Cuando entré en la música, en trabajar arriba de los escenarios, ahí sí. En mi casa no teníamos mochila de baño. Teníamos balde. Y me dije: “Vamos a comprar una mochila de baño, estoy podrido de llenar el balde, ir a llenarlo, ir y venir”. Eso fue lo primero. Y después un calefón. Teníamos un termotanque chiquito, esos que son eléctricos. Hay veces que nos bañábamos y nos olvidábamos de desenchufarlo. Era un peligro”.

“Le agradezco a mi viejo, un montón. Fue un laburante de Coca-Cola, un camionero. Tuvo hernia de disco de bajar cajones. Y me apoyó mucho. Cuando arranqué con la música mi vieja me decía que lo que hacía no me iba a dar de comer. ‘Terminá el colegio, andá a estudiar, me decía’, Sin embargo, terminé el colegio, estudié, pero mi viejo fue el que me acompañó mucho para que me dedique a la música”, sentenció Lescano, visiblemente emocionado.

 

Después de probar sus dotes con el teclado, la conductora le manifestó: “Yo iría a la bailanta a tocar un tema con vos”. Y entre risas, y fiel a su estilo, Lescano cerró: “Nos llenaríamos de plata si vos venís a la bailanta”.